Querer a alguien no es cuestión de físico. Es de sensaciones. Que te haga temblar sin estar. Que consiga que sonrías aunque no puedas verle.
Es una mezcla de sentimientos con pensamientos, es dejar pasar todas las oportunidades por quedarte sólo con una. La suya.
Es ver fácil la situación más complicada.
Es un caos. A veces lo es.
Pero el corazón puede y la razón domina. Y tú eres intenso. Y merece la pena. Y sí. Y ¿porqué no?
Porque irse cuesta más que intentarlo.
Que algunas veces nos marchamos.
Y no precisamente porque queramos hacerlo. Debemos.
Y no digáis que es de cobardes.
Muy valiente hay que ser.
Y yo no me voy, no quiero.
Ahora no.
-Deja de adivinar mis respuestas, dame las tuyas-

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